Los Pirineos, uno de los espacios naturales más bellos e importantes de nuestro país, están atravesados por cientos de carreteras, pistas, caminos y senderos que nos llevan a disfrutar de cada uno de los rincones de este macizo montañoso. Enlazando estas vías pueden realizarse un gran número de rutas con las que descubrir distintos de estos lugares.
Las rutas por los Pirineos son innumerables, pero en este artículo te hablamos de una que gira en torno a uno de sus lugares más icónicos, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en el corazón del Pirineo Aragonés. Se trata de “La Ronda de Ordesa”, una de las rutas Slow Driving que propone Turismo de Aragón. A través de ella visitarás gran parte de este precioso Parque Nacional y otros lugares que se encuentran en sus proximidades y que harán que te enamores aún más de esta fantástica zona de la provincia de Huesca.
¿Nos acompañas por esta ruta por los Pirineos? La Ronda de Ordesa:
La duración que creemos conveniente para esta ruta es de 4 días. Con este tiempo podrás disfrutar con calma de cada uno de los lugares a visitar, sin prisas, conociéndolos y saboreándolos como se merecen, ya que pasarás por algunos de los mejores lugares que ver en España.
Día 1: La primera jornada nos llevará de Biescas al Valle de Bujaruelo.
-Biescas
Comenzamos la ruta en Biescas, un precioso pueblo situado en el Valle de Tena. Dividido en dos por el río Gállego, te recomendamos pasear por su bonito casco histórico y descubrir sus preciosas calles flanqueadas por construcciones que mantienen intacta la esencia de la arquitectura típica de esta zona pirenaica. Son de visita obligada sus dos iglesias románicas, El Salvador y San Pedro; y la Torraza de Acín. Además, a 5 kilómetros se encuentra su legendaria ermita de Santa Elena, subir hasta ella merece la pena.
Salimos de Biescas por la N-260 y, a tan solo 3,7 kilómetros, encontramos la siguiente parada de esta ruta por los Pirineos:
-Gavín
Este pequeño pueblo mantiene intacta su esencia y encanto de los típicos pueblos de montaña. Su monumento más destacado es la ermita de San Bartolomé, situada en las afueras del pueblo. Se trata de una iglesia construida en el siglo X y que cuenta con una torre-campanario sin precedente.
Tras visitarla, continuamos por la N-260 e iniciamos el ascenso al puerto de El Cotefablo, uno de los más transitados del Pirineo Aragonés. Durante la subida te recomendamos hacer alguna parada para disfrutar de los paisajes que ofrece.
-Yésero
La tercera parada de esta ruta por los Pirineos es Yésero. En este pequeño pueblo podrás conocer varios ejemplos de arquitectura popular construidos con la milenaria técnica de la piedra seca. Además, también podrás descubrir varias chimeneas tradicionales de la zona, rematadas con el típico “espantabrujas”. Antes de continuar con la ruta, no debes perderte la iglesia de San Saturnino y la Casa de la Pez, además de asomarte a los miradores con los que cuenta Yésero y que ofrecen unas maravillosas vistas de sus alrededores.
Después, continuaremos 20 kilómetros por la N-260 para encontrar la siguiente parada:
-Torla
Llegamos a Torla, puerta de entrada al Valle de Ordesa, uno de los 16 parques nacionales de España. Al llegar a Torla su preciosa estampa, con las fascinantes paredes de Ordesa al fondo, hará que sientas la necesidad de detenerte y capturar esa preciosa imagen. Sus estrechas y retorcidas calles conseguirán que te enamores aún más de este precioso pueblo y te llevarán hasta la iglesia de San Salvador, su monumento más destacado. Además, Torla es uno de los pueblos con más servicios de la zona, por lo que puedes aprovechar para realizar algunas compras o degustar la gastronomía típica de la zona.
La primera jornada va llegando a su fin y para terminar:
-Valle de Bujaruelo
A pocos kilómetros de Torla encontrarás un cruce desde el que surgen las carreteras que se adentran en el Valle de Ordesa y en su vecino, el Valle de Bujaruelo, último lugar a visitar durante el primer día. Este valle, forjado por el río Ara, ofrece espectaculares estampas en toda su extensión, por lo que te recomendamos ir haciendo paradas, siempre que sea posible, para disfrutar de ellas. Al final del camino encontrarás una pradera en la que se encuentra el Puente de Oncins. Desde este punto surgen diversas rutas que te llevarán a conocer más en profundidad este fantástico valle, uno de los mejores lugares que ver en el Pirineo Aragonés. Si aún queda tiempo, no dudes en hacer alguna de ellas, ¡merecerá la pena!
Concluido el primer día de esta ruta por los Pirineos, toca descansar para comenzar con las pilas cargadas la segunda jornada. Puedes elegir Torla, pueblo más cercano a Bujaruelo, o Broto, que será el punto de partida del segundo día, para alojarte.
Día 2: la segunda jornada transcurre entre los pueblos de Broto y Aínsa
-Broto
Comenzamos el segundo día de esta ruta por los Pirineos en Broto. Además de pasear por sus calles disfrutando de sus bellos rincones y sus monumentos, como la iglesia de San Pedro, no debes perderte la Cascada del Sorrosal. Para llegar a ella tendrás que completar un pequeño trayecto a pie por el barranco del Sorrosal. ¡Merece la pena!
Y tras disfrutar de la espectacular cascada continuamos con la ruta hasta la siguiente parada:
-Sarvisé
En el corazón del Valle de Broto, rodeado de montañas y a orillas del río Ara se encuentra el pueblo de Sarvisé. Merece la pena hacer una pequeña parada en él para pasear por sus calles y empaparse un poco más de la esencia pirenaica.
-Fiscal
La siguiente parada de la ruta será el pueblo de Fiscal. Se encuentra también situado a orillas del río Ara, pero ya fuera del Valle de Broto. En él no debes perderte el Batán de Lacort, la Torre Costa y la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Junto a esta última se encuentra la portada románica de la iglesia de Jánovas, que fue trasladada hasta este lugar para salvarla de la construcción del embalse que nunca llegó a ejecutarse.
-Congosto de Jánovas
Siguiendo el curso del río Ara llegamos a la siguiente parada, un impresionante cañón forjado por el propio río. Para conocerlo puedes realizar parte de la Geo-Ruta GR7, que transcurre paralela al río Ara. Además, puedes completar esta parada descubriendo el propio pueblo de Jánovas, con mucha precaución, ya que está en situación de abandono y el estado de sus casas y calles no es bueno.
Tras disfrutar de esta fantástica zona, continuamos hacia la que será la penúltima parada del día:
-Boltaña
La estampa de Boltaña que puede verse desde la N-260 ya deja claro que es un lugar de parada obligada. En su casco histórico no debes perderte la iglesia de San Pedro Apóstol, en la que podrás ver el coro que originalmente se encontraba en el Monasterio de San Victorián, lugar que conocerás el la próxima jornada de la ruta. Además, no puedes perderte las vistas que ofrece el mirador del Castillo. El sendero parte desde la Plaza Mayor y es muy posible que la subida te deje sin aliento, pero las vistas merecen la pena.
Cuando hayas recuperado el aliento y disfrutado de la vista, continuamos hacía la última parada del día:
-Aínsa
Y para rematar la segunda jornada, Aínsa, uno de los pueblos más bonitos de España. Sin ninguna duda, es una de las paradas más especiales de esta ruta por los Pirineos. Sus calles merecen ser disfrutadas con calma, saboreando lentamente cada uno de sus rincones, conociendo sus plazas, su castillo, su colegiata y asomándome a sus miradores. Y para terminar la jornada, te recomendamos relajarte en alguna de sus terrazas tomando una Cerveza Rondadora, elaboradas muy cerca de Aínsa, y saboreando la gastronomía típica de la zona.
En Aínsa encontrarás varios alojamientos, por lo que puede ser el lugar perfecto para descansar y coger fuerzas antes de la tercera jornada.
Día 3: la tercera jornada nos llevará del Pueyo de Araguás a Buerba
-El Pueyo de Araguás
La tercera jornada girará en torno a la preciosa e icónica Peña Montañesa. Precisamente la primera imagen que veas de El Pueyo de Araguás será el propio pueblo con esta bonita montaña al fondo. Ya dentro de este pequeño pueblo, te recomendamos pasear por sus calles y descubrir los preciosos rincones que guardan. La más característica es la calle de Santa Cruz, que acaba en una curiosa y bella rinconada sin salida.
Tras visitar El Pueyo de Araguás, una estrecha, sinuosa y preciosa carretera, que ofrece estampas únicas, te llevará a la segunda parada del día:
-Real Monasterio de San Victorián
Dicha carretera te llevará hasta la falda de la Peña Montañesa, donde se encuentra ubicado el Real Monasterio de San Victorián. Considerado uno de los más antiguos de España, este bonito monasterio está declarado Bien de Interés Cultural. Actualmente, tras años de abandono, está en restauración y es posible realizar visitas guiadas por algunos de sus espacios. Su enclave, el paisaje que lo rodea y su historia, hacen de él una de las paradas más especiales de esta ruta por los Pirineos.
Para llegar a la siguiente parada tendrás que deshacer parte del trayecto hecho para llegar a San Victorián. Disfrutando de nuevo de la conducción y de las estampas que ofrecen las carreteras pirenaicas llegarás a:
-Laspuña
Pero antes de llegar a este pueblo, te recomendamos detenerte en la ermita de la Fuensanta, situada unos dos kilómetros antes de Laspuña. Desde la carretera, una pista te llevará a este bello rincón. Y ahora sí, llegamos al pueblo de Laspuña, situado en la falda de la Peña Montañesa y a orillas del río Cinca.
Tras pasear por sus calles, retomamos la marcha hasta el próximo destino:
-Mirador de Puyarruego
A tan solo 5 kilómetros de Laspuña, tras un par de cambios de carretera, llegarás al Mirador de Puyarruego, situado en una de las curvas de la carretera que une Buerba y Puyarruego. Desde él podrás disfrutar de unas fantásticas vistas del macizo de Cotiella y de la Peña Montañesa, protagonista de esta jornada.
Tras asomarte a él, continuamos la ascensión hacia Buerba. Los amantes del ciclismo recordarán que la Vuelta Ciclista a España transcurrió por esta carretera en el año 2020, de ahí que esté señalizada con indicaciones que marcan las distancias al final del puerto y los desniveles.
-Cañón de Añisclo
Llegamos a otra de las paradas más importantes de esta ruta por los Pirineos y que forma parte del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido: el Cañón de Añisclo. Para llegar a él podrás acceder desde la carretera que transita por el fondo del cañón, actualmente cortada, o por la carretera que llega desde Buerba, la misma en la que se encuentra el Mirador de Puyarruego. Antes de llegar, te recomendamos hacer paradas en los miradores que encontrarás en la carretera y que te ofrecerán unas maravillosas vistas del Valle de Vió, la entrada al Cañón de Añisclo y los picos Mondoto y Añisclo. Para conocerlo más en profundidad te recomendamos hacer alguna de las rutas que transitan por él. Una de las más populares es la senda circular que une el Molino de Aso y la Ermita de San Urbez. Es muy sencilla y te encantará.
-Buerba
La última parada del día es el pequeño pueblo de Buerba. Su plaza se encuentra presidida por un gran fresno del que se dice que tiene propiedades curativas para el ganado. Paseando por sus calles, y como en otros pueblos de esta ruta, podrás ver las bonitas chimeneas tradicionales y típicas de esta zona.
Una vez visitado, puedes elegir uno de los alojamientos de este pueblo como lugar de descanso antes de empezar la última jornada, o puedes desplazarte a Vió, que será punto de partida el cuarto y último día.
Día 4: la última jornada arranca en Vió y nos lleva al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
-Vió
Comenzamos la última jornada en Vió. Un pequeño pueblo de calles sin asfaltar, enmarcado por un enclave natural único y que es en sí un maravilloso mirador a todo el entorno que lo rodea. Además de disfrutar del encanto que lo envuelve, no debes perderte la iglesia de San Vicente Mártir.
Antes de acceder a Vió o a la salida, te recomendamos detenerte en la Collata de las Fuebas. Uno de los puntos más fotografiados del Pirineo Aragonés. Desde él podrás disfrutar de unas maravillosas vistas del paisaje natural formado por los picos Mondoto, Sestrales y el Macizo de Monte Perdido al fondo.
-Fanlo
Tras visitar Vió y asomarte a las vistas de la Collata de las Fuebas, volverás por la misma carretera hasta la entrada al Cañón de Añisclo para esta vez, continuar hasta el pueblo de Fanlo, siguiente parada de la ruta. En él podrás descubrir varias casonas que datan de los siglos XVI y XVII. No puedes perderte la Casa Ruba. Y su iglesia, de estilo gótico, también merece una visita.
Ahora nos dirigimos a la última parada de esta ruta por los Pirineos. De camino volverás a pasar por Sarvisé, Broto y Torla, pero no te detengas, te espera:
-Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
En esta ocasión nos adentramos en el Parque Nacional para visitar el fascinante Valle de Ordesa. Como recomendación, intenta disponer del máximo tiempo posible para disfrutar de este fantástico espacio, uno de los lugares más bellos de España. Hay muchas formas de conocer Ordesa. Una de las más habituales e imprescindibles es completando la ruta que lleva desde la pradera hasta la Cola de Caballo, una cascada situada al final del valle. En ella pasarás por un gran número de espacios de gran belleza y que quedarán para siempre grabados en tu retina. Cascadas, bellos paisajes, unas preciosas vistas de Monte Perdido, el bosque de hayas… Por esto te recomendamos guardar el mayor del tiempo posible para esta parada, hay mucho que ver en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Otra buena manera de conocer este lugar es subiendo a los Miradores de Ordesa, para ello puedes hacerlo a través de una excursión en 4x4. ¡Los paisajes que verás son una locura!
Y hasta aquí la ruta por “La Ronda de Ordesa”. Esperamos que la hayas disfrutado tanto como nosotros. Si es así, seguro que se te ha pasado volando y habrás quedado enamorado de esta fantástica zona del Pirineo Aragonés.
Para los más aventureros, también puede ser buena opción alquilar una autocaravana o camper y completar la ruta en uno de estos vehículos. Nosotros lo hicimos así y, la verdad, fue una experiencia fantástica, de desconexión total y disfrutando al máximo de cada uno de los lugares y espacios visitados. Además, en la zona no tendrás problema para encontrar campings disponibles para pernoctar. ¿Te animas?