Una visita a Valladolid siempre es bienvenida por parte de cualquier viajero que tenga gusto por los monumentos y los edificios antiguos. Castilla y León es una tierra muy rica en este sentido, y su ciudad más poblada es un claro ejemplo de ello. En un territorio donde no hay una capital declarada oficialmente, ejerce como tal y se presenta como una opción fantástica para hacer algo de turismo por el interior de la península. Posee todo tipo de ocio del que disfrutar, pero el de lugares que visitar es sin duda su plan estrella por excelencia.
Todo ello a pesar de que a mediados del siglo XX varias reformas urbanísticas dieron buena cuenta de edificios de renombre que se encontraban en su casco antiguo. No por ello ha dejado de ser una villa importante en la que se celebraron grandes eventos en la etapa dorada del imperio español, llegando incluso a ser capital de aquella institución. De todo ello todavía hay muestras a lo largo de todo su perímetro y permite al turismo sumergirse en las hazañas vividas en aquella época.
Tanto si lo que te embauca son las grandes fachadas, como los interiores y sus decoraciones exquisitas, como los edificios dedicados a un tipo de ocio específico, como los monumentos de carácter religioso, en este repaso encontrarás motivos de sobra para acercarte y disfrutar de todas las joyas imprescindibles que ver en Valladolid.
1.- Casino Roxy
Un edificio especialmente icónico para Valladolid es el del tradicional Casino Roxy. La sala de juegos tiene una historia que se remonta al cine, en la época de la guerra civil, y aunque ahora haya cambiado de vistas sigue conservando muchos de los elementos de aquella primera cara visible. Una cara estrenada en plena guerra civil española en unos cines que llevaban este mismo nombre y que fueron inaugurados por una familia zapatera que decidió cambiar de ocupación.
En el año 2010 llegó la remodelación gracias a la adquisición de la propiedad por parte de Enrique Cerezo, actual presidente del Atlético de Madrid. Pero la fachada sigue conservándose prácticamente en su totalidad y es donde se refleja la verdadera importancia de los Lafuente en Castilla. Su patio de butacas y anfiteatro superior son los grandes atractivos de la parte interior.
2.- Teatro Calderón
Hablar del Teatro Calderón es hablar de uno de los teatros más prestigiosos de toda España y que ha sido considerado como uno de los mejores a lo largo de la historia. Se inauguró en 1864 en el mismo lugar donde yació el antiguo palacio del Almirante de Castilla y su fachada de estilo clasicista le hace ser uno de los puntos para no perderse en Valladolid.
Su sala en forma de herradura está decorada con obras de Augusto Ferri, aunque las lámparas modernistas son también un punto para visitar y poder observar con majestuosidad. En 1999 tuvo que ser restaurado y reinaugurado por la corona española, sobre todo en la parte de su escenario y sus dependencias principales en las que se redistribuyó mucho mejor el espacio. Todo eso es un gran reclamo para visitarlo.
3.- Academia de Caballería
En pleno corazón de la ciudad se puede y se debe visitar la Academia de Caballería. En la Plaza Zorrilla, donde comienza cualquier desplazamiento hacia el centro de la villa, se encuentra este cuartel militar constituido en 1847 como fruto de la desamortización. El colegio que se encontraba en Alcalá de Henares llegó hasta Valladolid y se emplaza en el edificio llamado como “El Octógono”, que sería destruido por un incendio en 1915.
En 1921 se construye el actual edificio de estilo historicista, inspirado en otros edificios de piedra arenisca, y con toques renacentistas sobre todo en los remates de la fachada. En su interior está el Museo de Caballería, por lo que una visita guiada es ideal para comprobar como convivían los integrantes de las órdenes militares del país.
4.- Monasterio de San Benito
Y otra construcción de Valladolid que se rehízo sobre las cenizas de otra, en este caso de las del antiguo Alcázar Real, es el actual Monasterio de San Benito. Un edificio histórico en la ciudad, con una fachada de estilo gótico muy característica y perteneciente a la orden benedictina. Sus dos torres de la entrada es lo que más impresiona, si bien merece echar un vistazo a sus alrededores en la noche cuando todo queda iluminado.
Dentro tiene el Museo del Patio Herreriano que posee obras artísticas de la etapa contemporánea, además de tener varias oficinas municipales y que el Ayuntamiento ha decidido aprovechar para aportarles un uso.
5.- Casa Consistorial
Y no podía faltar tampoco echar un vistazo a la Casa Consistorial de Valladolid o Ayuntamiento de Valladolid. Inspirado en el de Salamanca, tiene elementos similares a la Academia de Caballería y destaca ese ladrillo rojo que le da algo diferente desde su construcción en la Plaza Mayor en 1908. Para seguir con la tradición en la historia de la ciudad, también se levantó sobre los restos del anterior edificio dedicado a las mismas artes.
La influencia de la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París (École des Beaux-arts) se ve reflejada en este edificio y seguramente es la mejor representación de la influencia gala de este tipo en toda España. Su interior tampoco te lo puedes perder.